El pozole es uno de los platillos
más representativos de la comida mexicana y es, quizá, el plato por excelencia
para celebrar las Fiestas Patrias.
La historia del pozole se
remonta a la época prehispánica y tiene un origen que resulta fascinante.
Era un símbolo ceremonial para
los aztecas, y sólo podía ser consumido por los sacerdotes de más alto rango y
el emperador en ocasiones muy especiales, como algunos festejos religiosos.
Los aztecas consumían el
pozole preparado con carne humana y es ahí donde radicaba principalmente el
carácter ceremonial de este platillo.
La carne humana provenía
posiblemente de los guerreros que eran sacrificados en ritos de adoración al
sol. Tras la Conquista, los españoles sustituyeron la carne humana del pozole
por carne de cerdo, “que aparentemente tiene un sabor similar”.
A pesar del cambio de
ingredientes y el significado inicial que tenía el pozole, el consumo de este
platillo se mantuvo entre los indígenas. El pozole, al igual que otros muchos
elementos culturas prehispánicas, sufrió una adaptación y permaneció, aunque
dejó de ser un platillo exclusivo de altos mandos religiosos y políticos.
Una de las cosas que se
mantiene del pozole original es el maíz cacahuazintle, el cual tenía un
significado dentro de la cosmovisión de los aztecas por su color blanco.
Para los aztecas, el color
blanco se asociaba con personajes septentrionales como Iztacmizcóatl, la Blanca
Serpiente de Nubes.
El pozole antiguo que
combinaba maíz, base de la cultura mesoamericana, y carne humana tenía un
profundo significado para los aztecas, “significaban el rito donde se
verificaba la dualidad permanente de la visión mística del nahua: origen y fin,
cielo y tierra, día y noche, simbolizado de muchas maneras en sus artes, en su
filosofía y en sus ritos: Quetzalcóatl que repta- vuela con la
serpiente-águila, en su condición terrenal-divina”.
El pozole tenía una función
ritual para los aztecas; los hacía participar del rito de la creación.
“Comiendo el alimento sagrado,
místico, el sacerdote participa directamente en ese rito. En ese sentido no es
muy diferente a la liturgia sagrada de los católicos en la comunión: la hostia
y el vino representan, simbólicamente, la sangre y el cuerpo de Cristo”.
Ingredientes:
- 1 kilo de maíz cacahuazintle
descabezado
- 1 cabeza de ajo entera
- 1 ¾ de lomo o de pierna de
puerco
- 400 gramos de patitas de
puerco bien limpias
- 1 cebolla partida a la mitad
para cocer las carnes
- Sal al gusto
- 6 chiles anchos desvenados,
despepitados y remojados en agua muy caliente
- 1 cucharada de orégano-
Caldo donde se cocieron las carnes, el necesario
Nota: La carne de cerdo la
puedes reemplazar por pollo si así lo prefieres.
Para acompañar el pozole
- 2 lechugas orejonas medianas
en rebanadas delgadas
- 1 manojo de rabanitos bien
lavados y rebanados
- 2 cebollas medianas
finamente picadas
- Limones partidos en
cuarterones
- 16 tostadas
- Salsa picosa
Para la salsa picosa
- 20 chiles de árbol asados y
despepitados
- ½ taza de vinagre
- Sal al gusto
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